DAR PODER (EMPOWER) A SUS SUBORDINADOS.
Desarrollar
buenas relaciones de equipo puede darle a su organización una ventaja
importante sobre las demás. Un miembro de su equipo motivado, confiado,
orientado al logro y con recursos, se aboca hacia el logro de los objetivos y
en consecuencia aumenta la rentabilidad dramáticamente. Las tácticas a
continuación van dirigidas a obtener lo mejor de su gente y a lograr un sentido
de trabajo en equipo. Usadas adecuadamente, logran extraer resultados
extraordinarios de personas ordinarias.
1.
Celebre las pequeñas victorias.
Consiga
algo para celebrar con su gente cada semana. Puede ser un aniversario o el
logro personal de alguien, pero es preferible celebrar logros de trabajo.
Obsequie un premio y agradezca a todo el grupo por hacerlo posible. Pequeñas
celebraciones, hechas con frecuencia, hacen una gigantesca diferencia en la
moral y en la productividad.
2. Administre
la pila de trabajo.
Escriba
la siguiente frase en un papel: “El procedimiento / regla / regulación /
política mas fastidioso y humillante con el que tengo que vivir es…”.
Distribuya copias de este papel entre los miembros de su equipo e invierta una
mañana discutiéndolo con ellos. Escriba todas las frustraciones en un papel, y
comprométase de inmediato a hacer los cambios necesarios.
Repita
este ejercicio regularmente y logrará construir poderosas y duraderas
relaciones de trabajo, además de mejorar el rendimiento y la satisfacción de su
equipo.
3.
Cristalice su misión.
Antes de
su próxima reunión de equipo, escriba la misión de la empresa en una
transparencia. Cuando comience la reunión, encienda el proyector y manténgase
en silencio unos minutos para atraer la atención de los asistentes. Una vez
asimilada, haga dos preguntas: ¿Qué estamos haciendo que interfiera con
alcanzar este objetivo? y con mucha valentía, ¿Qué estoy haciendo yo para sabotearlo?
No hable mas hasta que obtenga respuestas
escríbalas. Al terminar el ejercicio, agradezca a los participantes y
tome el primer paso para resolver los obstáculos identificados.
4.
Muestre su aprecio ahora.
Escriba
notas a dos o tres personas de su equipo cada semana, felicitándolos por sus
logros profesionales o personales. Haláguelos por tomar riesgos, por manejar
bien a un cliente o por cualquier otra cosa.
Toda
persona responde bien ante un elogio. Un empleado contento es un empleado
productivo.
5.
Analice los descarrilamientos.
Cuando un
proyecto, operación o nuevo producto fallan, examine el por qué. ¿Estuvo el
problema en el ciclo diseño/desarrollo? ¿Se utilizaron inadecuadamente los recursos?
Haga todas las preguntas necesarias para determinar qué se hizo mal y cómo
evitar una falla similar en el futuro. Reúnase con los miembros del equipo para
discutir los hallazgos del análisis.
6.
Cree una experiencia tipo Indiana Jones.
Organice
un fin de semana de aventura. Invite a sus colegas y subordinados a participar
de una experiencia en torno a un tema como toma de riesgo, trabajo en equipo,
innovación, etc. Tenga claro qué desea obtener de la experiencia.
Aventuras
tipo escalada de montaña, paracaidismo, caza y caminatas por la naturaleza
proveen bastantes retos como para lograr más confianza y camaradería entre sus
compañeros.
7.
Busque ventanas de oportunidad.
Organice
un equipo de gerentes (preferiblemente recién contratados) para que visiten al
menos otras diez empresas. No necesariamente deben ser similares a la suya;
pueden ser centros de operaciones, sedes principales, plantas o almacenes. El
objetivo de estas visitas es buscar cosas que otros hagan bien y su empresa mal
(o que no hagan de un todo). Trate de identificar al menos diez mejoras que
pueda implantar en su empresa, dos de las cuales en forma inmediata. Entre
otras áreas en las cuales buscar mejoras: mantenimiento, seguridad, medición y
monitoreo de resultados, reclutamiento, aseguramiento de calidad y
entrenamiento.
LIDERAZGO
DE EXCELENCIA.
Mostrar
un liderazgo de excelencia es sencillamente fundamental y esencial para el
éxito organizacional a largo plazo. El liderazgo crea confianza; los empleados
seguirán a aquellos que demuestren integridad, sensibilidad, decisión y un
sentido claro de misión. Las siguientes tácticas le ayudarán a mejorar esas
fortalezas.
8.
Conozca al experto.
Si quiere
ser un verdadero experto en determinada área, aprenda de quienes ya lo son.
Identifique una habilidad específica que desea mejorar (manejar múltiples
proyectos a la vez o manejar grupos de discusión, por ejemplo) y consiga a
alguien que sea realmente bueno en eso. Una vez identificada la persona ideal,
pídale permiso para sentarse y observarlo. Hágalo con detenimiento y tome las
notas necesarias, pero no haga juicios aún acerca de la utilidad de sus
técnicas para usted. Una vez hecho esto, reúnase con la persona y revise con él
sus anotaciones. Comparta sus observaciones y obtenga respuestas a preguntas
como ¿Qué problemas surgen al usar estas estrategias? ¿Cómo puedo poner esas
estrategias a funcionar? ¿Qué otros recursos utilizar?
9.
Organice un club del Libro del Mes.
Cada mes
seleccione un libro que le ayude a desarrollar sus habilidades gerenciales.
Trate de identificar consejos específicos que le puedan ayudar a enfrentar los
retos de cada día. Invite a sus compañeros de trabajo a seleccionar y leer los
mismos libros, para luego discutirlo y compartir ideas. La gente se emociona
cuando discute nuevas ideas, así que su club de libros puede realmente
transformar su organización.
10.
¿Algún voluntario?
Algunas
de las mejores oportunidades de desarrollo están en los proyectos especiales de
la empresa o de la comunidad. Busque liderizar comités o proyectos sin fines de
lucro, le ayudarán a desarrollar habilidades como comunicación, planificación y
motivación.
11.
Establecimiento de objetivos.
Comience
un cuaderno para analizar sus objetivos y detectar los cambios en su forma de
pensar a lo largo del tiempo. En este cuaderno:
-
Clarifique los objetivos que realmente desea alcanzar (en su carrera, a nivel
personal, posesiones, etc.). Redáctelos en forma positiva (“quiero hablar con
confianza en público” en lugar de “quiero sobreponerme al miedo a hablar en
público”).
-
Determine cómo sabrá que ha alcanzado el objetivo.
-
Determine cómo se verán afectadas sus relaciones con el logro del objetivo.
-
Determine el efecto que tendrá alcanzar el objetivo sobre usted. Si predice los
cambios, no resentirá el impacto en su vida.
- ¿Qué
obstáculos tiene para conseguir los objetivos?
Planifique
estrategias específicas para eliminarlos. El propósito de este ejercicio es
determinar lo que realmente quiere (que no necesariamente es igual que lo que
usted cree que quiere). Además, le proporcionará un plan para lograrlo.
12.
¿Dónde está parado?
Lea los
reportes financieros de los últimos tres años de su empresa. Su contenido
revelará quién está siendo aclamado o acusado por los resultados, así como
cuáles son los principales problemas, retos y oportunidades que la alta
gerencia está considerando. Estudie cuidadosamente estos documentos en busca de
información que le sea útil. Por ejemplo, si su departamento es mencionado y
por qué.
13.
Trate a los demás con justicia.
La
mayoría de los gerentes se considera imparcial y capaz de evaluar las
fortalezas y debilidades de los demás. Pero el verdadero reto es evaluarse a
usted mismo. Tome una hoja de papel y trace una línea vertical. Piense en un
empleado que usted considere “difícil” y escriba del lado izquierdo sus
características y comportamientos. Luego piense en otro empleado con el que se
sienta cómodo y descríbalo del lado derecho. Compárese con las características
de ambos. Seguramente usted se parecerá mas a la descripción del lado derecho,
en términos de creencias, actitud y valores. En consecuencia, juzgará a las
personas con características del lado izquierdo mucho más estrictamente.
Pregúntese: ¿Estoy siendo justo y consistente con todas las personas con que
trabajo, o tengo preferencias?
BIENVENIDO
EL CAMBIO.
Las
corporaciones tienen que aumentar dramáticamente su capacidad de aceptar el
cambio. El ambiente de negocios cambia constantemente y las organizaciones
deben cambiar acordemente. A nadie le gusta el cambio constante. Implica
interrupción, egos afectados, toma de riesgos, replantearse estrategias y
aceptar lo desconocido. Pero aunque no le guste, tiene que aceptarlo. Las
siguientes tácticas le ayudarán a sentirse más cómodo con la inestabilidad.
14.
Construya escenarios “mejor caso” y “peor caso”.
Usted
toma decisiones constantemente. Pero tomarlas se dificulta cuando tiene miedo
de equivocarse. Para facilitar las decisiones, comience por describir la acción
que debe tomar. Ahora cierre los ojos e imagínese tomándola. ¿Qué es lo peor
que puede pasar? Visualice todo saliendo mal: los sistemas fallan, la gente
renuncia, usted es despedido, la compañía quiebra, etc. Ahora visualice lo
contrario: todo sale bien. Todos están mas contentos, son mas productivos,
usted es ascendido, etc. Lo mas seguro es que ocurrirá el mejor escenario. Pero
enfrentar de antemano sus peores temores le permitirá ponerlos en perspectiva y
manejarlos adecuadamente.
15.
Consulte su bola de cristal.
Reúnase
regularmente con los jóvenes de su departamento, para discutir las tendencias
presentes y futuras en su industria. Plantéese preguntas como ¿Habrá demanda
para nuestros productos o servicios en cinco o diez años? ¿Quién será nuestro
competidor el año que viene o en tres años? Discuta además el impacto que
tendrán sobre su empresa: la descentralización, la desregulación, la oficina
sin papel, los mercados globales, el mercadeo directo, los nuevos desarrollos
en telecomunicaciones, etc. Haga un esfuerzo por identificar tendencias,
incluso aquellas que no parecieran afectarle ni remotamente a usted o a su
empresa.
16.
Ponga su dedo en el pulso.
Revise su
calendario de los últimos doce meses y con mayor detalle los últimos noventa
días. ¿Qué le dice acerca de sus prioridades, hábitos, habilidad de planificar,
actividades administrativas, etc.? Un análisis a fondo le permitirá identificar
los colegas con quienes mas se reúne, si realiza actividades que pueden ser
combinadas o delegadas, si tiene hábitos poco productivos, etc. A partir del
análisis, puede mejorar su forma de trabajo de inmediato.
17.
Pare de resistir.
La única
forma de manejar la realidad corporativa cambiante es administrar el caos,
aceptar la ambigüedad y manejar múltiples prioridades. Puede parecerle difícil
a muchos, pero un gerente que se resista a hacerlo se verá afectado en el
futuro. Así que relájese y acepte el cambio. Comience un programa de cambio
incremental. Las siguientes son algunas técnicas para auto renovarse y
prepararse para el cambio en el trabajo: Abotónese la camisa con su mano no
dominante. Tome un curso de drama. Comience un nuevo hobby que no tenga nada
que ver con usted. Regale posesiones materiales. Escuche la TV en lugar de
verla. Conduzca al trabajo por otra vía. Llegue una hora antes. Haga alguna
actividad física en su hora de almuerzo. Coma Tofu. Hágase un masaje. Si le
gustan las novelas de misterio, lea biografías.
COMUNICARSE
PARA MEJORES RESULTADOS.
La
comunicación efectiva es necesaria para prestar un servicio de calidad y para
mantener una alta productividad. Es también una buena forma de motivar a su
equipo, permitiéndole alcanzar un alto nivel de confianza y empatía.
18.
Seleccione un tema.
Cada mes,
seleccione una nueva habilidad comunicacional que desee mejorar. Puede ser
clarificar mejor sus expectativas a los empleados, proveer retroalimentación
(feedback) instantánea, delegar, o manejar los desacuerdos. Una vez
seleccionada, vívala, cómala y respírela en todo lo que haga: reuniones, v
isitas, discusiones, etc. Cuando use la habilidad del mes, analice la situación
posteriormente para determinar si puede mejorar aún más.
19.
Haga auditorias de lenguaje.
Escuche
con atención lo que dicen los demás. ¿Cómo se expresan los empleados,
supervisores y clientes? ¿Cómo se describen unos a otros? ¿Muestra el lenguaje
orgullo por la empresa y sus productos, o falta de ánimo y miedo a la
incertidumbre? Seguidamente, revise que está causando el tipo de lenguaje y
determine qué deprime y qué anima a los empleados. Seguramente podrá hacer algo
al respecto.
20.
Maraville a los nuevos.
Junto con
los departamentos de Relaciones Públicas y Comunicaciones, prepare una
presentación de la empresa para nuevos empleados. Presente allí los valores, la
historia, la misión, etc. Todo con mucho
ánimo y optimismo. Un proyecto de esta naturaleza puede parecer poco
importante, pero realmente puede lograr reafirmar el deseo del empleado por trabajar
allí, adoctrinarlo sobre aspectos importantes (por ejemplo, la obsesión por la
atención al cliente) y demostrarle que hay espacio para crecer y sobresalir.
Pero cuidado: prometa solo aquello que puede cumplir.
21. Un
centavo por lo que piensa.
Los
gerentes generalmente piensan que animan suficientemente a sus empleados, casi
siempre se equivocan. La gente repite los comportamientos que son reforzados,
así que no pierda ninguna oportunidad de decir cuándo le gusta algo. Todas las
mañanas coloque un puñado de monedas en su bolsillo. Cada vez que halague a un
empleado por un trabajo bien hecho, pase una moneda al otro bolsillo. Si al
final del día no ha pasado todas las monedas, pregúntese por qué ha sido tan
austero.
MANEJO
DEL TIEMPO.
El tiempo
es más que dinero, es la forma cómo medimos la vida y el día de trabajo. No
tiene precio y no es recuperable. Cada una de las siguientes actividades van más
allá de las técnicas superficiales de administración del tiempo, para lograr
cambiar su conducta. Recuerde: si tiene el control sobre su tiempo, controlará
su vida.
22. La
técnica RAAB (RAFT en inglés).
Reúna
todos los documentos y papeles que tenga en su mesa de trabajo y elimínelos
utilizando una de las siguientes cuatro opciones. Su objetivo: tocar cada papel
una sola vez. Redirigir:
Mándeselo a alguien, deléguelo en un subordinado, devuélvalo a quien se lo
envió, etc. Use la creatividad para eliminarlo de su mesa. Actuar. Archivar: pero no lo ponga en otra pila
de documentos. Botar.
23. La
prueba del punto.
¿Hace
usted recircular los papeles sin actuar sobre ellos? Haga este sencillo
experimento: por las próximas dos semanas, cada vez que toque un documento,
colóquele un punto rojo. Al cabo de dos semanas, cuando consiga un reporte con
veinticinco puntos en él, tendrá en sus manos una prueba fehaciente de pérdida
de tiempo. Regrese al punto 22 y resuélvalo.
24. El
arranque de 10 minutos.
Todos
procastinamos, pero si decide eliminar la procrastinación de su vida,
seguramente fracasará. Una técnica menos drástica puede mejorar su
productividad. Coloque un cronómetro para que cuente diez minutos. Elija
entonces un proyecto que haya estado posponiendo y por los próximos diez
minutos haga algo que lo acerque hacia la culminación del mismo. El problema
con la procrastinación no es hacer el trabajo, es comenzar. Al sonar los diez
minutos, si quiere seguir trabajando en ello, hágalo; si no quiere, tiene
permiso de dejarlo, siempre y cuando lo repita al día siguiente.
25. La
jarra de las preocupaciones.
La
preocupación es la emoción más destructiva que existe, puede acabar con su
efectividad gerencial. He aquí una solución: Consiga una jarra o lata grande.
Esta será su jarra de preocupaciones. Luego aparte un rato cada semana (los viernes
a las 4:00pm, por ejemplo). Cada vez que se preocupe por algo, escriba la
preocupación en un papel e introdúzcalo en la jarra. Recuerde que no puede
preocuparse en el momento, porque tiene un Momento Para Preocuparse (MPP). En
el MPP, saque todos los papeles de la jarra y léalos. Algunas preocupaciones le
parecerán tontas. Otras ya se habrán resuelto. Algunas todavía tendrá que
manejarlas, hágalo ahora. Si un grupo de personas a su alrededor tienen
preocupaciones, preocúpense en equipo. ¿Quién se ve mas preocupado? ¿Quién
puede relatar el peor resultado posible para una situación? Se puede convertir
en una actividad divertida que servirá para darse cuenta que no vale la pena
preocuparse a menos que pueda hacer algo al respecto, y si puede hacer algo,
simplemente hágalo.
ALCANZAR
SU MÁXIMO POTENCIAL.
Su
desarrollo no depende de las habilidades organizacionales únicamente. Usted es
responsable por desarrollarse como persona. Los siguientes consejos le ayudarán
a alcanzar su máximo potencial.
26.
Pavimente el camino hacia el perdón.
Seleccione
dos o tres compañeros de trabajo con quienes sus relaciones no estén muy
buenas. Recuerde las razones que le llevaron a la ruptura y pregúntese si vale
la pena reparar la relación.
Probablemente
valga la pena repararla. Comience a hacerlo perdonándolo.
27.
¡Luces, Cámara, Acción!
Todo
actor sabe el valor de ensayar. Un gerente con habilidades poco arraigadas
puede ensayar para obtener mejores resultados. Identifique sus puntos débiles.
Puede ser evaluar la efectividad de sus subordinados o vender una idea a su
jefe. Cualquier cosa que quiera hacer en forma más efectiva, consiga otra
persona y ensaye. Dramatice la situación y actúe con pasión, haciendo el papel
tal como quisiera hacerlo en la realidad.
28.
Preguntas difíciles.
Agárrese
fuerte, lo que viene no será fácil. Pase unos minutos contemplando cada una de
las siguientes preguntas. Si lo hace honestamente, tendrá la oportunidad de
crecer y avanzar en el camino del liderazgo.
- ¿Cuándo
y en qué circunstancias estimula a los demás a hacerse dependientes de usted?
- ¿En qué
formas utiliza usted su posición para controlar, en lugar de guiar, las
contribuciones de los demás?
- ¿Qué le
lleva a decirle a los demás lo que quieren oír, en lugar de lo que debe decir?
- ¿Cuándo
fue la última vez que se sintió amenazado por las habilidades, destrezas o
atractivo físico de otra persona?
- ¿Cuándo
fue la última vez que estando atascado, sin saber qué hacer, dudó en pedir
ayuda? ¿Por qué?
- ¿Si un
“Genio” le ofreciera tres deseos, qué pediría?
- ¿Si
tuviera la garantía de culminarla sin problemas, que aventura le gustaría
experimentar?
- ¿Cuál
fue su peor fracaso de niño? ¿De adolescente? ¿Como Gerente? ¿Como ser humano?
¿Qué ha aprendido de esos fracasos?
Contestar
estas preguntas le ayudarán a descubrir el verdadero usted. Eso es
recomendable, puesto que un cambio en la percepción externa siempre es
precedido por un cambio en la interna.
29.
Mantenga la astucia.
Tómese un
sabático que le ayude a mejorar sus destrezas laborales. Deberá negociar con su
superior acerca de la longitud y naturaleza del mismo, pero no sobre el
propósito, mejorar sus habilidades para beneficio de la empresa. Los sabáticos
son buenos también para recargar las baterías. Algunas ideas para poner su
mente en funcionamiento: (1) involúcrese en un nuevo negocio (start up) dentro
de la empresa (2) sepárese de su área para pensar cómo resolver un problema en
ella (3) si trabaja en la oficina principal, vaya a una sucursal lejana (4) si
trabaja en una sucursal, vaya a la oficina central (5) vaya “prestado” a otra
división, o a una organización sin fines de lucro (6) dedique tiempo a entrenar
nuevos empleados (7) investigue, diseñe e implemente nuevos programas de
entrenamiento (8) ejerza otra función por un tiempo (9) hágase el portavoz de
la empresa (10) establezca la oficina de innovación. Las opciones no tienen
límite. Pero siempre tenga el objetivo en mente y manténgase en contacto con
quienes le autorizaron, querrán saber
que aprovecha el tiempo.
INNOVACIÓN
DIRIGIDA.
Las
empresas líderes saben que un ambiente rico en innovación produce empleados
superiores, la fuente de rentabilidad a largo plazo. La innovación creativa es
una destreza que se aprende. Pruebe las siguientes técnicas para expandir el
poder de su mente y de sus ideas.
30.
Exponga su empresa a territorio virgen.
Organice
un grupo de personas (alrededor de cinco) que estén poco familiarizados con
determinado aspecto de las operaciones de la empresa. Encárguelos entonces de
una tarea específica en esa área. Por ejemplo, ponga gente de mercadeo a
resolver un problema de compensación de empleados. Aunque no tienen
experiencia, déjelos resolverlo. Recuerde que muchas de las grandes ideas han
surgido de la persona incorrecta en el campo incorrecto en el momento
incorrecto (por ejemplo, la película Kodachrome fue descubierta por dos
músicos).
31.
Lecciones de Kindergarten.
Libere al
niño creativo en usted. Compre un poco de plastilina (arcilla o pasta para
moldear), consiga un espacio y momento tranquilo; comience a moldearla y
olerla. Concentrarse en eso le ayudará a relajarse. Haga entonces una
escultura. Tome notas de las ideas que cruzan su mente. Pueden comenzar a
surgir ideas y soluciones a problemas no relacionados. Analice sus obras de
arte y piense qué dicen sobre usted.
32.
Que pasaría si.
Este
método (en Inglés What if) le lleva a pensar más allá de lo tradicional, lo
común o lo habitual. Le permitirá pensar en forma más estratégica. Hágase
preguntas de este tipo:
- ¿Qué
pasaría si el ser humano viviera doscientos años?
- ¿Qué
pasaría si la semana laboral fuera de tres días?
- ¿Qué
pasaría si cada país produjera un solo producto?
- ¿Qué
pasaría si el cielo fuera morado?
Ahora,
contéstelas. Si el ser humano viviera doscientos años, se retiraría a los 150.
Pudiera retrasar mas las cosas. Gastaría mucho más en regalos. Las aseguradoras
quebrarían. Las familias serían más grandes. Esto tiene gran aplicación en los
negocios. ¿Que pasaría si pudiera leer la mente de su cliente? ¿Si las
computadoras se dañaran todos los días (o nunca)? ¿Si no hubiera límite en los
aumentos salariales? Si hace este ejercicio con regularidad, se convertirá en
un pensador, con capacidad de ver viejos problemas en nuevas formas.
33. La
exhibición en evolución.
Convierta
una sala de reuniones en una galería de ideas. En la pizarra, escriba un
problema organizacional de interés para todos. Luego invite a todos a ayudar a
resolver el problema agregando sus ideas u opiniones en las paredes. Cada pared
puede tener un tema: nuevas ideas, preguntas, redefiniciones del problema, etc.
Empleados de todos los departamentos pasarán por allí, leerán lo que dicen los
otros, y aportarán algo. Utilice todas las ideas para resolver el problema.
BIBLIOGRAFÍA.
Resumen
del libro: Curso Corto Para Gerentes.
Escrito
por: Bil y Cher Holton.
No hay comentarios:
Publicar un comentario